miércoles

Cuando la culpa te inmoviliza

Si la preocupación es una emoción inútil- como ya hablamos en el blog- la culpa no se queda atrás. La culpabilidad es una emoción que inmoviliza- como la preocupación- pero por algo que está en el pasado.
Preocupación y  Culpa son las dos formas más comunes de angustia. Muchos son los que se sienten mal por algo que no debieron hacer y consternados por algo que podría suceder. Estas dos emociones te inmovilizan en el presente. La preocupación por algo futuro y la culpabilidad por algo que ya pasó.¿Y tu presente? Pues, lo vives angustiado por esas emociones inútiles.

Culparte no cambiará nada. Con la culpa gastas tu precioso tiempo presente en algo que ya pasó y que no puedes hacer que desaparezca. Somos máquinas de culpabilidad, diseñadas y cuidadosamente lubricadas con constantes mensajes que nos inducen a caer en la culpa, desde que eramos pequeños.
Hay dos formas básicas de culpabilidad: la residual, que ha sido aprendida desde pequeños y nos queda como un residuo cuando somos adultos. Creo que a todos pueden sonarnos familiares frases como estas: "deberías sentir verguenza por lo que hiciste", "que dirán los vecinos, no te da verguenza", "yo me sacrifico por tí", "nos dejaste avergonzados", "si sigo con tu madre es solo por tí", "si sigues con esa chica/o va a darme un infarto", "haces que me suba la presión", "me enfermaré por lo que estás haciendo". Pero, la culpa va y viene, porque los niños reciben el mensaje y aprenden a manipular con la culpa, porque ven como los adultos consiguen lo que quieren usando la culpabilidad. Les suena esto: " el papá de Juan lo deja hacer eso", "no me quieres, debo ser adoptado" etc.
La culpabilidad es una forma de manipulación primero de los adultos hacia los niños, que luego arrastramos en forma residual y se repiten en la adultez en las relaciones de poder o autoridad (marido, esposa, jefe, gerente) El otro tipo de culpabilidad es la autoimpuesta. Somos nosotros mismos quienes nos imponemos el castigo por haber actuado de una forma que alguien no aprueba. Porque siempre es por eso, lo que hicimos que nos provoca culpa, es algo que otro no aprueba (o la sociedad en su conjunto, o un grupo determinado)
De manera que la culpa en todo caso es una reacción a normas que nos fueron impuestas por la autoridad cuando eramos niños y como resultado de nuestro esfuerzo por vivir a la altura de las normas que aunque no nos convencen, la cultura y la sociedad imponen.

Sentirnos culpables no cambiará lo que pasó. Si bien la sociedad envía constantes mensajes represores,  la culpa nos la imponemos nosotros mismos.  La pregunta es ¿porqué nos imponemos una emoción tan inútil y angustiante? Porque la culpabilidad es una retribución sicológica por si misma, como que nos da permiso para repetir el mismo comportamiento, porque nos absolvemos a nosotros mismos con la culpa. Neutótico verdad?

Entonces,  porqué persistimos en un comportamiento tan negativo? Lo hemos aprendido y costará un poco liberarnos. Es que la culpabilidad retribuye, te atrapa en el pasado y te libera de ocuparte de cambiar tu presente, de asumir riesgos y responsabilidades, y es una excelente forma de manipular y de atraer la compasión de los demás.
La culpa no es una manera natural de comportarse. Es una reacción emocional aprendida que sólo puede ser usada si la víctima le muestra al manipulador que es vulnerable a ella.
Comenzar a liberarse de ella es una tarea de todos los días. Se puede comenzar dejando ir el pasado, que quede bien atrás, tratando de ver que cosas del presente estamos rehuyendo al escondernos tras algo del pasado, aceptando tus creencias, gustos y hábitos sinceramente y sobretodo no buscando la aprobación constante de los demás.
Cuando uno logra vivir sin necesitar ser constantemente aprobado por lo demás, se libera de la culpa. Eso es vivir haciéndose cargo de uno mismo, responsabilizándose por su propia vida.
Por favor, vivan sin culpa.

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